De origen asiático, la salsa de soja está elaborada a partir de una mezcla de soja fermentada, trigo, agua y sal marina. Es un condimento imprescindible en muchos platos y es mucho más versátil de lo que parece, desde ingrediente de otras salsas hasta sustituto de la sal de mesa.
Es un potenciador natural del sabor. Es facil de digerir y es rica en sodio.
Tiene un 65% menos sodio que el resto de las salsas.